jueves, 13 de marzo de 2014

La apocalipsis y los privilegios


Hay décimas de segundos en las que necesitamos salir de lo que algunos llaman la bastarda política ¡pero es imposible! Porque para lo bueno y para lo malo las entrañas de la vida y de la muerte son políticas, por eso no la dejemos en manos de nadie que no sea de fiar. 
 
La fecha de hoy es mítica, porque nacieron y murieron dos notables de la historia de la humanidad. Nació en 1879 el científico alemán A. Einstein, quién desarrolló la teoría de la relatividad, y en 1883 falleció el pensador alemán K. Marx, creador de la doctrina del socialismo científico.

Sin sus aportaciones, hoy sería todo tan distinto… que es posible que estuviéramos reflexionando sobre el sexo de Bambi.

Por eso, si Einstein levantara la cabeza y viera el abuso del relativismo cultural que se está llevando a cabo, rayando en el nihilismo absoluto, para describir la emborronada biografía de Rouco, máximo representante del nacionalcatolicismo más fundamentalista, pensaría que la competencia crítica de los opinaderos ha sido abolida, y algunos siguen siendo intocables.

Porque, el ya hoy ex-presidente de la Conferencia Episcopal, cesado por el Papa Francisco, ha sido la vara de mando de la ideología más ultra de este país, marchándose apocalípticamente, y entrometiéndose en temas civiles, como la supuesta ruptura de España, apoyando la teoría conspirativa del 11 M, la obligatoriedad de la asignatura de religión católica como materia evaluable, advirtiendo la fragilidad del matrimonio para la conservación de la familia y recordándonos como, la punta de su iceberg, estuvo contra los anticonceptivos, contra el divorcio, incluso contra la Constitución, terminando con una soflama contra el fantasma del aborto.

Rouco, olvidó decir que ha muñido los asuntos económicos con la Santa Sede, de la forma más costosa para los españoles, creyendo el 80% de estos que la Iglesia debe pagar el IBI por sus 100.000 inmuebles, la mayor propietaria de los bienes rústicos y urbanos de este país, y de los que está exento, dejando de ingresar 3.000 millones y recibiendo en subvenciones 11.000 mil millones de las administraciones públicas, en el marco de los privilegios que le otorga el gobierno de España. 

Recuerdo que Marx dijo: “La razón siempre ha existido, pero no siempre de una forma razonable.”

Kechu Aramburu del Rio
Publicado el 14 de Marzo del 2014, en el Correo dee Andalucia